Se considera que uno de los principales motivos por los que es tan necesario el feminismo en nuestra sociedad, es el hecho de que actualmente aún podemos encontrar el androcentrismo muy presente en nuestra sociedad. Pero ¿Qué es?
Este término hace referencia al hombre como medida de todo. Es decir, se toma como referencia al hombre para cualquier opinión o en el caso de los medios de comunicación (cuya información construye la opinión pública) para seleccionar las noticias que se consideran más o menos relevantes.
Un buen ejemplo de esto son los casos de diferentes movimientos importantes en las últimas décadas en los que las personas entrevistadas solían ser en su mayoría varones, por no decir en su totalidad, como ocurre en la guerra de Irak, muy mediatizada, de la cual os animo a buscar testimonios de mujeres (años 2003-2004) o el caso de las mujeres palestinas en 2007.
Pero no solo ocurre esto en los medios de comunicación, sino que este sesgo está también presente en la medicina: Si hombres y mujeres (desde un punto de vista estrictamente biológico) somos diferentes ¿Son las dosis de medicamentos o los síntomas de enfermedades iguales para ambos sexos? La respuesta es clara, NO. ¿Sabíais que los síntomas de infarto conocidos son ÚNICAMENTE aplicables al sexo masculino? (Dolor y presión en el pecho y un intenso dolor que comienza en el brazo izquierdo). Las mujeres en caso de sufrir un infarto sentirían dolor abdominal, estómago revuelto y presión en el cuello.
Este androcentrismo me llevo a la siguiente conclusión, que esto sí, es mi humilde opinión y por supuesto, es debatible.
El lenguaje recogido como correcto en la actualidad utiliza el masculino plural para hablar tanto de hombres como de mujeres (Hablar sobre un grupo de niños, cuando en él se incluyen niñas y niños).
¿Verdaderamente el masculino plural se usaba porque antiguamente ni siquiera se reflejaba a las mujeres en los textos legislativos, ya que muchos derechos solo eran aplicables a los hombres (véase por ejemplo el derecho al voto, a la propiedad, etc.) o realmente estaba incluyendo a ambos géneros? Esto mismo me llevó a la siguiente cuestión ¿Y las personas que NO se identifican con el género binario hombre-mujer? ¿Están también incluídas?
Así pues, decidí que al comenzar a usar un blog que pretendía que llegase a toda persona que quisiera saber más sobre feminismo y lo que le rodea, mi forma de escribir sería mediante lenguaje inclusivo, que pese a que aún no esté contemplando en la RAE, en mi opinión, es la mejor forma de que cualquier persona se sienta identificada con el texto y contempla, sin sesgos, a todos los géneros actuales, tanto binarios como no binarios.
Quizás la forma más sencilla de cara a su uso hablado sea la utilización de la e, en lugar de la x como se hace en este blog. Os dejo un vídeo cortito que lo explica muy bien.
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